miércoles, 22 de febrero de 2012

Misión Esperanza: Padre nuestro que estás en los cielos


Muy bien guerreros, hoy comenzamos con el entrenamiento. Luego de tanta preparación, de los preliminares, hoy llegamos al gran núcleo y centro de nuestra formación.

Como han podido observar, el Padrenuestro empieza y termina con una alabanza.
Sus primeras palabras son Padre nuestro que estás en los cielos. Veamos en profundidad esta frase:
La primera palabra, PADRE, tiene varias aplicaciones:
Ø  Ancestro, padre, progenitor. El fundador de una familia o tribu. Y podemos decir, sin ningún tipo de duda, que Dios es el ancestro de nuestra familia, la humanidad, El nos creó y nos dio el sello distintivo de Su imagen y semejanza.
Ø  Inventor, creador: También se utiliza la palabra padre para identificar al inventor, el creador de una sociedad, o aun aquel que infunde su propio espíritu en otros, gobernando sus mentes. Y en este punto también podemos ver a Dios, el creador de todo, quien nos ha infundido aliento de vida. Siendo Dios mismo el origen de todo lo bueno que hay en el mundo.
Bajo estas dos primeras acepciones, podemos llegar a la conclusión de que Dios es padre de todos los seres humanos, ya que El es el origen de todo y El nos creó. Pero hay un punto más que debemos tratar antes de cerrar este tema y es el de la:
Ø  Adopción: Como sabemos, fue nuestro pecado el que nos alejó de Dios y por el que dejamos de ver a Dios como nuestro Padre, para apartarlo de nuestro camino y seguir nuestro propio rumbo. Pero Jesús, el Hijo de Dios, en todo sentido, por ser de Su misma  naturaleza, dio su vida para comprarnos. Pago el precio de nuestra esclavitud en el pecado. Nos rescató con su preciosa sangre (1 P 1.18-19).
Gracias a este sacrificio, cuando nosotros recibimos el perdón de Cristo, somos adoptados en la familia de Dios.
Gá 4.4-6 nos dice claramente que somos adoptados hijos de Dios, y hermanos de Jesús. Y que podemos llamar a Dios, Abba Padre. Pero sobre este tema ya hablaremos dentro de un momento.
Ro 8.17 dice que somos herederos de Dios y coherederos con Cristo. ¿Qué significa esto? Que somos hijos con todos los derechos, y obligaciones, de la familia de Dios. No somos hijos de “segunda”, sino que somos considerados como Jesús, nuestro hermano mayor, el primogénito entre muchos hermanos (Ro 8.29). Aunque como Cristo no hay nadie, Dios nos ha hecho coherederos junto con Él. Obtendremos bendiciones y promesas junto con Jesús. Que bendición más grande. Y pensando en esto, ¿no le dan ganas de hacer una pausa y alabar a este Dios tan grande que nos ha dado tantos regalos junto con Cristo Jesús? (Ro 8.32)
Por si no sabe porque alabar a Dios, les comparto algunas bendiciones más que nos ha dado Dios a través de la sangre de Jesús:
Lavó nuestros pecados Ap 1.5
El pecado ya no nos domina Ro 6.14
Podemos entrar con libertad al lugar santísimo, ante la misma presencia de Dios He 10.19
Recibimos sanidad integral Is 53.5, 1 P 2.24
Nos libró de la maldición, haciéndose maldición por nosotros. Gá 3.13

Pero no solamente es EL PADRE, sino NUESTRO PADRE.
Como leímos en Gá 4.6 (y si no lo hizo es un buen momento para que tome su Biblia, lea el pasaje, y siga leyendo este texto.) ahora que somos sus hijos podemos llamarle Abba Padre, esto significa que así como podemos hablar con nuestro papá, sin necesidad de títulos o de presentaciones formales, sino que cariñosamente le podemos decir, papi, papito, papá, de la misma manera, con esa confianza, con ese cariño e intimidad podemos acercarnos a Dios para hablar con Él. Muchas veces nos referimos a Dios como El Señor, y es verdad, El es Señor de nuestras vidas, de todo lo creado, es el Señor de Señores y Rey de Reyes. Y orando así, a veces, nos vamos alejando de Dios, perdiendo la intimidad y manteniendo la distancia. Pero yo pregunto, el hijo del presidente, ¿Cómo saludará a su papá? “¿Excelentísimo presidente, muy buenos días?” O “¿Hola papi, como amaneciste hoy?” De la misma manera, nosotros podemos presentarnos ante el gran trono del Rey de Reyes y decirle abba Padre,  papito querido. El Dios todopoderoso, Creador de todo lo que existe, que habita la eternidad, nos invita a nosotros, los cristianos, a que nos acerquemos a Él con confianza y que le podamos llamar Padre. Dios está buscando una relación de intimidad, personal y de amor con cada uno de nosotros.

Por fe podemos llamar al Dios QUE ESTÁ EN LOS CIELOS, nuestro padre. A diferencia de nuestros padres terrenales, que algunos fueron buenos, y otros no tanto, nuestro papá celestial, el Dios Todopoderoso, omnipresente, omnisciente y omnipresente, siempre va a procurar lo mejor para nosotros. (Lc 11.13). Quizás no hayamos tenido una buena experiencia con nuestros padres, pero hoy si podemos empezar a gozar de las bendiciones, del cuidado y la protección que Nuestro Padre Celestial tiene para cada uno de nosotros.

Con todo lo que hemos dicho hasta ahora, ¿Cuánto de todo esto está presente en nuestras oraciones? ¿Nos acercamos a Dios con la confianza de un hijo a su padre? ¿Lo alabamos por los increíbles beneficios de ser hijos suyos? ¿Entendemos la grandeza, el poder, de nuestro Padre en los cielos, y el privilegio que tenemos de acercarnos a Él llamando Abba Padre?
Es tiempo de que comencemos a examinar nuestras oraciones, y empecemos a aplicar lo que hemos visto hasta ahora.
El primer paso que debemos tomar es empezar a orar con ese cariño, confianza e intimidad a Dios, no alejarnos al asombrarnos de Su Majestad, sino acercarnos por habernos redimido y adoptados en su familia.
Que cada oración que hagamos pueda tener esa nota de alabanza a Dios por lo que ha hecho por nosotros.
Pueda salir de nuestro corazón gratitud por ser adoptados en su familia.
Recordemos que podemos llamar a Dios, ¡¡Papito querido!!

Ejercicio:
1.       Ejercicio en grupo: Miércoles 6:00 pm, Sábados 6:30 pm, Domingos 9:00 am.

2 comentarios:

Juan Camilo Ruiz dijo...

yo lo llamaria mas facil !papote querido! papito tiene diminutivo para el ser mas grande creador de todo el universo...jejejej

Unknown dijo...

si, pero es que papito esta rodeada por una intimidad y una cercania que papote, a mi entender, no logra alcanzar jejejeje